Cuida tus prendas
Aquí compartimos algunos consejos para que vuestras prendas de elPulpo se mantengan como el primer día.
La Etiqueta
Ese pequeño trozo de tela contiene gran cantidad de información relevante que frecuentemente pasamos por alto. Con tan sólo mirarla se podrán ver los cuidados recomendados para cada prenda y evitar sorpresas desagradables.
El Lavado
Por lo general solemos lavar demasiado, incluso ropa que llevamos puesta durante unas cuantas horas. Lo hacemos por costumbre e ignoramos el desgaste que un lavado supone, junto con su respectivo consumo de energía y agua. Si nos paramos a evaluar qué prendas necesitan realmente ir a la lavadora, nos daremos cuenta de cuántos lavados innecesarios hemos estado haciendo.
¡Ah! Y siempre mejor del revés y en frío. De esta manera se reduce el desgaste en la cara exterior de la ropa, la que se muestra, y se expone más la cara interior, la que está en contacto con la piel. Además, al lavar en frío (a 30ºC) no sólo reducimos el gasto de energía, sino que mejoraremos otros aspectos: el agua fría no afecta al tejido, al color, a la elasticidad o a la resistencia de las prendas como sí lo hace el agua caliente.
El detergente
Los detergentes que comúnmente encontramos en los supermercados suelen ser de origen sintético, llenos de químicos no biodegradables. Esto no sólo es muy agresivo para nuestra ropa, sino que se traslada a nuestra piel.
Si puedes, busca opciones de detergentes naturales y evita aquellos que contengan ftalatos, fosfatos y tensioactivos. Cuanto menor sea la lista de ingredientes, mejor.
El Secado
Utilizar la secadora es otra gran costumbre que puede acelerar el desgaste de nuestras prendas, tanto a causa del roce como por el calor.
Secar la ropa al aire libre siempre será la mejor opción: permite cuidarla por más tiempo, reduce el gasto energético a 0 y no tiene ningún coste.